No texteo más, "El texting puede matar".

La goma de mi carro, picture by generacionasere

Hasta ayer yo era uno de esos chóferes que andan por la autopista, enviando mensajes de texto detrás del timón. Digo hasta ayer, pues hoy estoy vivo y no maté a otro conductor de milagro.

¿Cómo se me pudo ocurrir atender al celular al tiempo que manejaba por la I-95 South (Miami) la autopista más peligrosa de los EE. UU? Aún puedo ver la chapa trasera del auto que tenía al frente, creciendo ante mis ojos a la velocidad de un FLASH (pan-paN- PAN). De milagro pude girar a la izquierda en el último segundo, y es por eso que ahora les puedo contar.

De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Utah, el envío de mensajes de texto detrás del volante aumenta 6 veces el riesgo de accidentes y es casi tan peligroso como manejar ebrio.

¿El enviar mensajes de texto es una "peligrosa" fiebre social?
Una avalancha de accidentes, divorcios, despidos del trabajo y serios problemas de concentración, son parte de las acusaciones que se atribuyen al "texting". En mi opinión, ni el avance de la tecnología, ni dicha herramienta digital, sobrepasan nuestro deseo de desafiar lo prohibido. Debido a lo anterior y aunque protestemos, el texting continuará.

GeneracionAsere/tony