Stick around: Stay; don't GO anywhere

El éxodo como eslogan -escapista- se ha apoderado de miles de muros en las redes sociales tras el fin de la campaña electoral del 2016. 

"Irse a Canadá, a Europa, mudarse de planeta."

Antes de llegar a EUA tuve que pasar por encima de la ideología de casi todos los familiares que me vieron nacer y crecer  hasta convertirme en un opositor a ellos mismos. A este país llegué con mis manos vacías y he saboreado un tipo de libertad que una vez encontrada es muy difícil que se me pueda arrebatar. No, gracias. No pienso irme a vivir a otra parte. 

En pocos años he aprendido a apreciar mi individualidad, a votar y a vencer el miedo de decir en voz alta lo que pienso. La libertad tiene un precio, la democracia tiene un valor y todos tenemos el derecho y pero a la vez el "deber" de ser y estar aquí.

¿Acaso este país pertenece a un individuo,  o a una de las dos mayorías que se enfrentaron en la contienda? El día en que sobren estadounidenses por su ideología, color de piel o religión, a partir del momento en que no quepa alguno de nosotros, ya sea por exclusión o auto-exclusión, la idea fundamental de esta república comenzará a languidecer.

Stick around: Stay; don't GO anywhere
Si no hay oposición no hay juego democrático y como resultado del abandono un solo lado se queda con el monopolio de la política que le permite la impunidad para legislar, juzgar y gobernar. Créanme que los cubanos sabemos cuan terrible puede ser el escape de una parte de la sociedad para la nación.
¿Tan frágiles y susceptibles son tus ideales que no puedes darle la oportunidad de defenderlos con serenidad ante tus oponentes? La Constitución, el Código y los valores fundacionales de este país están del lado de quien se expresa y se reúne para defender la democracia.
Este juego acaba de comenzar. ¡Quédate!

GeneracionAsere/LA PANDILLA