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19 de enero de 2013

On sábado, enero 19, 2013 by GeNeRaCiOn AsErE   No comments
Desde Cuba nos enviaron esta caricatura que nos conmovió. No sabíamos del autor hasta ahora. Es obra de Omar Santana. ¡Excelente trabajo! Muchas Gracias a su autor.
¿Quién le devuelve ahora el sueño a nuestros padres?  
Es duro mirar como nuestros viejos envejecen en la isla, desgastados por la tragedia de forrajear a diario (y "en silencio ha tenido que ser) el tubo de pasta, el litro de aceite y hasta el plato de comida, o ver como se nos mueren afuera, pensando que a lo mejor para el año que viene podrán regresar a su país. 
¿De qué sirvieron las consignas... la ideología y tanta politiquería? 
¿Cuál es el saldo luego de medio siglo de intransigencia de todas las partes involucradas en conflicto? 
¿Quién nos dice "hoy" que el sueño que nos inculcaron en la escuela, no era más que una estrategia política para ganar la guerra fría? 
Claro que somos descreídos, ¿A quién le vamos a creer? ¿Qué FE es capaz de reconciliar el vacío que nos queda luego de desmoronarse la utopía en que crecimos? Ni cielo azul, ni redondel, ni futuro luminoso. Afortunademente no fuimos como el Che, porque uno solo de los Stalin de este mundo es peor que todos los Rockefeller juntos. 

PATRIA, LIBERTAD, REVOLUCION
¿Quién nos devuelve ahora esas palabras? 
Hoy que somos adultos y tenemos la obligación  de responder todo a nuestros hijos, solo nos queda  ‘apretar el culo y darle a los pedales’ para encontrar una voz propia, donde más nunca  quepan las consignas.
Si es cierto que nuestra identidad no se circunscribe  a una coyuntura política o a un determinado punto geográfico (La Habana, Miami, Madrid), aquellos  valores que nos inculcó nuestra familia son irreversibles y prevalecerán por encima de cualquier ideología. 
A pesar de  que hoy -como ayer- se nos quiera separar en diferentes grupos -de edad,  colores y tendencias políticas-  hay un montón de cosas que nos unen: la música, la sazón, cierta forma de hablar y miles costumbres. Podremos no ser iguales pero somos lo mismo,  ‘somos cubanos’, y ya nadie nos puede enseñar a serlo.

GeneracionAsere/LA PANDILLA