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23 de marzo de 2008

On domingo, marzo 23, 2008 by GeNeRaCiOn AsErE in    9 comments
Hoy nos estamos sumando a la iniciativa de Aguaya Berlin quien publicara en su blog el artículo En cinco años... de la excelente pagina Los miquis de Miami. Alla dejamos nuestro comentario y aquí también abundamos algo mas sobre lo la diferencia de ser cubanos


Hay muchas verdades en el post de los miquis y respeto su valor de hablar por lo claro. Cada cual tiene el derecho de ser consecuente con aquello que piensa y eso es también parte de vivir en libertad, en una libertad que en Cuba solo tuvimos en aquellos instantes cuando sonábamos escapar del país donde nacimos. ¿Pero en realidad… nos estábamos escapando de la isla o de su gobierno? No solo se trata de irse de Cuba, en todo caso lo importante es que Cuba no se vaya de nosotros. El diario sometimiento a un régimen te deja pocas prioridades y una de ellas es la sobrevivir, tal vez por eso cuando uno está preso no le hace falta ser cubano, lo que le hace falta ante todo es ser libre.
La diferencia entre nacionalidad y ciudadanía quizá sea lo que me salve mañana de sentirme un extranjero en Cuba, como ahora me sirve para saber que no soy más que otro cubano en el extranjero. Vivo en Miami desde hace 8 años y aun guardo el sueño ‘iluso’ de regresar a la Habana (sin régimen de facto) quizás por eso no haya optado aun por el derecho a convertirme en ciudadano estadounidense, aunque en realidad lo que implicaría eso –para mí – es un cambio de status legal, donde se deja claro que respeto y disfruto de ciertas normas para vivir en esta, mi segunda patria.
En honor a la verdad me es casi imposible hacer borrón y cuenta nueva... transferir con un juramento los recuerdos del pasado hacia el presente. Bien podría adquirir otra ciudadanía sin problemas, pero lo que si no puedo cambiar es mi nacionalidad. Ser cubano va más allá de insertarse en nuevos estilos de vida (que uno agradece y se acostumbra RAPIDISIMO), como el agua caliente en la ducha, el aire acondicionado, o que no escasee el papel sanitario, por ejemplo. Que bueno poder contar con las garantías que uno disfruta cuando vive en un país donde se respetan las leyes, donde existen varias corrientes de pensamiento que conviven sin pedirse la cabeza y donde el ciudadano ejerce realmente en libertad su derecho a la palabra. Aplaudo y disfruto todo lo anterior, sin embargo,

Si yo fuera sueco lo más probable es que tuviera un blog sobre festival del cangrejo en el verano de Estocolmo y cosas así... si en tal caso mi sitio abordara el tema cubano, es muy poco probable que escribiese con la vehemencia con que escribo y escribimos muchos de nosotros sobre lo que pasa, pasó, o esta pasando en la isla. Y por ahí es donde veo la cosa... aunque llevemos dos, cinco o veinticinco años desde este otro lado del charco, seguiremos identificándonos con el ajiaco que traemos adentro. Somos testigos físicos y protagonistas reales de lo que ha sucedido en la isla. Somos cubanos.
Algo nos une por encima de las generaciones, de la crisis de valores, de la antigua miseria y de aquella prisión donde crecimos y eso es lo que nos hace venir a leer y a escribir en la bloguera.
Soy cubano, luego entonces puedo ser Francés, Ruso o Sueco... las cosas de mi Tierra no pueden dejar de estremecerme y esa sensibilidad es más fuerte que el lugar y el tiempo donde he elegido vivir ahora en el exilio.
Un pasaporte extranjero no puede cambiarnos o transferirnos algo tan intrincado como la idiosincrasia; eso tampoco lo lograron las herramientas del régimen comunista, ni los maestros de la Anton Makarenko, ni los muñequitos rusos, ni las totalitarias becas en la escuelas al campo.
¿Quién me aguanta los pies cuando escucho la clave?

Hay algo que prevalece por encima de las dictaduras, un tipo de riqueza que va de mano en mano recorriendo el tiempo y que es intangible, por eso al final del camino no hay dos tipos de Cuba, ni tres o cuatro tipos de cubanos.
La patria no es la Revolución y mucho menos aquel tenebroso Socialismo. Al final de cuentas la cubania está por encima del discurso político, la patria es sencillamente de todos o de ninguno, por eso los politiqueros están obligados hoy a devolvernos las palabras que nos robaron ayer y nosotros a su vez, debemos tener hoy las ganas suficientes como para poder recuperarlas. Si es cierto que la Institucionalidad 'revolucionaria' logró desvirtuar en nosotros el significado verbal de ciertas voces como, héroe, revolución y libertad… lo que si me resisto a creer es que nos hayan secuestrado el sentimiento. Y la prueba es la bloguera (blogosfera).
Un abrazo grande a los miquis y muchas gracias por informarnos cada día de las cosas que suceden en la isla y además, por darnos la oportunidad de compartir y hablar de cosas tan duras como estas.

Generacion Asere.

9 comments:

Anónimo dijo...

BRAVO!!!

Anónimo dijo...

Sí, es la palabra, junto con los aplausos, que me ha venido a la mente. Parece una arenga política, veo el discurso en mi imaginación desde una plataforma rodeada de una multitud acalorada, aplaudiendo al final enfervorizadamente, a lo cual me apunto, por supuesto. Precioso discurso. Y muy bonita la foto de la bodeguita del medio, en amarillo.

Al Godar dijo...

Muy bueno el post de los Mikis, y las iniciativas de Aguaya y los Aseres de incluirlo aqui.

Vayan a ver la propuesta para la Concordia en mi blog, en Encuentro en la Red o en Kaos Cuba
Saludos
Al Godar

Los Miquis de Miami dijo...

muchas gracias a los aseres y aguaya por este link. un abrazo,

Skapada Blog dijo...

Yo ya tengo una segunda nacionalidad. ¿y qué? Puedo viajar el mundo entero sin pedir Visa ni dar esplicaciones ¿y qué?

Ser cubano es otra cosa, es lo mío. Cuba es mi país, con o sin hijos de putas. Al menos son mis hijos de puta y hablan mi idioma y me puedo cagar en su madre en el mismo idioma.

Ser ciudadano de otra parte no te cura el dolor men!

Aguaya dijo...

Gracias, GA, por el link, y mis respetos y apoyo a lo que han escrito aquí. A Los Miquis también por dar pie a este necesario debate.

Allá en mi blog me extendí un poquito comentando las opiniones anteriores a la mía. No voy a robarles mucho espacio, sólo a tenderles una vez más la mano en señal de amistad. Cuenten con la mía!

Un abrazo,
AB

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

prefiero ser Cubano y no es cuestión de orgullo, solo pura causalidad. Soy quien soy por una larga lista de cosas y ser Cubiche fue la primera!
albert

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

caballero, gracias a todos por pasar, debatir y poner la suya.
lo importante es poder decir las cosas, compartir eso que tenemos adentro y nos apasiona.
Es mil veces preferible decir que callar.

Un abrazo para el que lo quiera.
su socio tony.

Anónimo dijo...

Estupendo !! Te quedó bien lindo... Ana