Download

Recent Posts

23 de enero de 2008

On miércoles, enero 23, 2008 by GeNeRaCiOn AsErE in    10 comments


Hasta hace solo unos años atrás, las novelas móviles’ en Japón eran consideradas como un subgénero indigno. Hoy las cosas han cambiado para este nuevo ‘estilo literario’escrito desde los móviles por muchachos jóvenes (mujeres en su mayoría) que en medio de su viaje del trabajo a la casa o del hogar a la escuela, teclean una historia de ficción a velocidades increíbles... estos relatos son leídos luego por millones de fans en las pantallas extremadamente pequeñas de sus celulares.

La aceptación en el público de estas novelas móviles ha sido rotunda y hoy dominan ampliamente el mercado literario del país asiático. Por ejemplo, entre las Diez novelas más vendidas en el 2007, cinco fueron ‘novelas móviles’ escritas con frases cortas, muy semejantes a la mensajería de texto, pero que sin dudas guardan una estrecha relación con la estructura tradicional de desarrollo que encontramos en las novelas modernas.

En el ámbito cultural, los críticos de la materia han comenzado un agrio debate en nacional en el que cuestionan las implicaciones del éxito fácil conseguido por estos nuevos novelistas, augurando que este estilo de ‘escasa calidad literaria’ puede acelerar el declive de la literatura nipona.

Rin, es una muchacha de 21 años que escribió su novela "Si" en un período de seis meses, utilizando el escaso tiempo libre que le permitía el camino de su escuela al trabajo de media jornada. Luego de enviar su obra a un popular sitio en la Web para móvil lectores, la escritora fue votada como N º 1 en popularidad, por lo que su obra se transformó en un libro de 142 páginas de tapa dura, del cual se vendieron 400,000 ejemplares, para convertirse en la novela N º 5 de mayor venta en Japón durante el 2007

Rin, mostrando su novela 'Siiiiiiii'


A partir del ano 2000, el acceso masivo a los móviles coincidió con la mayoría de edad de una generación que comenzó a utilizar los teléfonos como computadoras personales, convirtiéndose este artilugio electrónico en parte indisoluble de la vida de millones de muchachos.
Cabe destacar la enorme influencia del género de historietas en este nuevo tipo de literatura. Muchos móvil novelistas nunca habían escrito un relato de ficción en su vida, así como tampoco la mayoría de sus lectores había leído antes una novela.

No sé si embullaran ustedes a escribir su 'novela móvil' en el teléfono celular, pero al menos en mi caso creo que la tengo bien difícil...
Nada mas de pensar en la rueda nuestra de cada día que tengo que dar para irme al trabajo, ya de por si amanezco PARCIALMENTE NUBLADO.
Ahhh, y cuando salgo de mi casa me persigno a diario para que el sol salga suave y bajito de sal, descafeinado vaya ... o para que esa tarde de regreso el tranque en el Express Way no sea tan denso, ni tan repleto de energúmenos 'furiosos' que cuando tu le pides cortésmente que te den un chancecito en vez de sonreir te ponen cara de toro embestidor ... ¡miraaaaa! Mira si algo poético me inspira pensar en medio de esa locura, es el de meterme a hacer un nuevo diccionario de malas palabras -te voy a ^/^@#$&^* si te cojo *&^%nauta-


¿Qué novela se puede escribir aquí en Miami un día laborable caballero?
Yo creo que esos son lujos dados al temperamento asiatico.

Tampoco me imgino a una joven del preuniversitario en la Habana, subida encima del camello tecleando la novela entre sus idas y ‘venidas’ del hogar para la escuela o viceversa.

Seamos honestos, para teclear una novela encima de un camello en la Habana se necesita tremendo poder de abstracción...
Si a aquellos narras de la Orquesta de la Luz pensaron que se la habían comido con su ‘rica salsa’ eso no es na’ para la gigante prueba que desde aquí les lanzo,

Yo exhorto a ‘Rin’ que viaje a la isla... e intente escribir una móvil novela sobre lo real maravilloso que es montarse encima del flamante ‘p2’ (nombre evocador) a las 7:00 am que para recorrer media Habana soportan en sus oídos a un ‘arco iris musical’ de olores... hedores... y simpáticos guaguanautas que pese al calor imperante no se ‘resignan a hablar en voz baja, sino que muy lejos de eso... montan tremeeeenda gritería en medio de cualquier guagua.

¿Me creen, o es que ya se les olvidó la bulla que se arma adentro de un camello?

Estimados narras,

¡Tírense con la guagua andando y manden para la isla del sol poniente, a una tropa de móvil novelistas para ver cuan rápido pueden teclear cuando tienen que ‘fildear’ de ida y vuelta a una ruta 10 del Vedado al Diezmero.

¿Es que será posible algún día futuro, escribir la 'móvil novela' de la guagua cubana? Definitivamente aquel que lo haga estará haciendo historia.

.

GeNerACiOn AsErE/tonygm

10 comments:

Aguaya dijo...

Bueno, yo creo que los que escriben ese tipo de novelas, como la autora Nr. 1 de que hablas, no lo hacen desde sus autos sino desde el metro u otro medio de transporte público. Yo misma tengo el inmenso gusto de leerme unos 3 libros al mes como promedio y eso sólo puedo hacerlo porque los leo en el tren, en el metro y en la guagua que cojo diariamente... si no, nananina.

No es de extran~ar que los teléfonos móviles enganchen también con novelas, música, etc: en el 2007 se estimaba el número total de usuarios en más de 3 mil millones, casi la mitad de la población mundial... y Japón está entre los primeros países de la lista...

Llegará eso algún día a los cubanos?????????

Anónimo dijo...

Cuando llegue el desarrollo a la isla y las guaguas anden vacías... (yo se que es una utopía, pero bueno...) podríamos ensayar entonces alguna que otra obra de teatro con ‘la guagua andando’, es mas yo creo que Medea quería hacer una representación así en su blog.
De cualquier forma me parece algo difícil escribir un novelon en adentro de la guagua cubana. ¿No crees? Problemas de temperamento...

Güicho dijo...

Ese es otro más de los fenómenos netamente japoneses. Los comercializadores occidentales lo han intentado con algunos de ellos, tamagochi o sudoku p.ej., pero el éxito ha sido apenas parcial o pasajero.

Y bueno, en una guagua, bus o colectivo siempre hay mucho más para mirar o rozar que el metro de Tokío.

Anónimo dijo...

Ya tengo título para la primera ‘móvil novela’ cubana
-‘Si me pides el pescao’ te lo doy’-
Como adivinan también se venderá acompañada de un sound track famoso y sobre todo muy pegajoso... te lo doy... te lo doy...te lo doy...
; )

Anónimo dijo...

aseres, muy bueno este tema. quizás no se podrá escribir dentro de un camello pero las historias de sexo, violencia y lenguaje de adultos dentro de ese monstruo son geniales para un camello. ¿se imaginan ustedes a casi 300 personas empujando uno en Boyeros, al lado de la fuente luminosa, a las 12 de la noche, para que volviera a arrancar y poder seguir el viaje? Año 97. Nunca se nos olvidará. Por ahí se puede empezar una.

LOS MIQUIS

Anónimo dijo...

perdón, geniales para un libro-camello.

LOS MIQUIS

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

Coño pero que buena historia esa...ajajajajaja ¡Empujaaaaa!
Deberíamos hacer una obra de teatro en un camello como quería MEDEA.
Caballero Miquis, guicho, maylin y los demás...dime si se embullan...


t.

GaviotaZalas dijo...

cada loco con su tema,,,Aguaya me encanta leer en tren o en la guagua,,,
NO SOPORTO LOS MOVILES,,pero reconozco q son utiles. saludos

Osvaldo Cleger dijo...

sin duda el nuevo genero requiere algunas condiciones que no se dan ni en cuba ni en Miami ni aqui en el viejo Oeste en que vivo: trasnporte publico eficiente, servicio de mensajeria de textos y de acceso a la Internet barato y demas... Pero lo interesante es precisamente como ciertas condiciones sociales y tecnologicas son capaces de generar nuevas formas literarias. Me gusta que sean ficciones escritas por gente de a pie, gente por lo general sin pretensiones literarias: esa es la tendencia actual. Cuando ocurre en un blog me gusta llamarlo "una ficcion casera". En este caso habria que llamarlas a la gringa, "fictions on the go" en la misma linea del vaso de cafe que nos llevamos en el "cupholder" del auto, por las mananas, antes de enfrentar el express way, el tumulto y la griteria!

Aguaya dijo...

apútenme para lo de la obra de teatro!!!!

Lo del "empuuuuujaaaa" me recordó a mi tutor cuando fue a Cuba en el 95 (después fue mi tutor, en aquel momento no lo era aun): el carro del viejo se quedó parado en el mismo medio de 23 y L, y el tutor, con todo su ringo-rango, se tuvo que bajar a empujar junto conmigo y otro par de locos que nos ayudaron :)))) Un poquito más abajo del Yara íbamos loma abajo y mi papá arrancó sin problemas...

Jajajaja, Güicho, pero tú no has visto los metros nipones como se ponen que no cabe un arroz más??? lo que pasa que allí el repello no significa lo que para nosotros, latinos al fin.