Chino, pero de Hong Kong, cubano, pero de Miami...

El 1 julio de 2007, se celebraron los diez años de la Declaración Conjunta, Sino-británica , mediante el cual la isla de HONG KONG, pasó a ser parte del territorio nacional chino, bajo la promesa del gobierno comunista, de que practicaría la política "un país, dos sistemas" propuesta por Deng Xiaoping, el cual se abstiene de aplicar el sistema económico socialista vigente en China al territorio de Hong Kong, por lo que se mantendría el estilo de vida y sistema capitalista durante 50 años (hasta 2047).


Es curioso como los habitantes de Hong Kong, aun pese a la influencia que ejerció el dominio británico por décadas allí, se sienten culturalmente ligados a China, conservando aun muchas tradiciones de su pueblo, como las religiones tradicionales, el culto a los ancestros etc., elementos que incluso han desaparecido en la región continental como secuela de la revolución cultural (del régimen Mao) y al férreo control totalitario del presente.


Ante la pregunta de identidad formulada a un ciudadano de la isla, es muy común obtener como respuesta que se sienten chinos, pero chinos de Hong Kong.


El paralelismo histórico-cultural de la situación antes descrita y la existente hoy entre Cuba y el exilio del Sur de la Florida es innegable, incluso debido a su proximidad geográfica y a la vez, a su diferenciación en cuanto a realidades políticas y económicas. Basta ahondar en el significado de la frase “cubano de Miami” para comenzar a encontrar (siguiendo el hilo conductor desde el efecto) las causas provocadas por la vivencia de eventos históricos diferentes en un mismo pueblo.


Dos Sistemas diametralmente opuestos, dan lugar a distintos estilos de vida, a planteamientos que aunque encontrados, parten de un mism o tronco cultural y esto es lo crucial para el futuro de nuestro país, pues cualquier diferencia convergerá sobradamente en un sentimiento de nacionalidad común.

Propiciar el intercambio desde el respeto a la diversidad de opinión y agregando Instituciones civiles, que funcionen Independientes y paralelas a un gobierno democrático, como complemento del panorama político, generador de esos pilares representativos de la sociedad, que garantiza la convivencia de partidos, religiones, razas y géneros desde un clima de respeto. Este es el reto que en última instancia tendremos que asumir todos los cubanos en un futuro inmediato.

Si hay algo que sin dudas resulta atractivo, en el tema de la identidad separada por un Sistema y un estilo de vida diferentes, es la posibilidad de que en el “futuro inmediato” ante la transición de Cuba al Sistema Capitalista, los cubanos de ambas orillas estemos ante las puertas, de vivir envueltos en una política de “dos países, un Sistema”, lo cual marcaría sin dudas, el encuentro definitivo de nuestro "único" pueblo.

GeNeRaCiOn AseRe/tonygm