Cuando los dinosaurios tiemblan.

Hoy las grandes cadenas de televisión (CNN, BBC, MSNBC) y diarios como The New York Times, son dinosaurios moribundos que pertenecen a una era pasada.

El acceso a la Internet de millones y millones de personas en nuestro planeta ha supuesto un replanteamiento de las comunicaciones en todos los ordenes; este nuevo intercambio descentralizado y personal de información se torna minuto a minuto más inmediato, poniendo en duda lo que divulgan programas noticiosos empaquetados en serie por las grandes transnacionales de prensa.

Serios declives en la Industria del disco, del cine, así como la caída en picada de los top shows nocturnos en la televisión americana, contrastan con la rápida expansión de los videojuegos o del inusitado interés por los “reality shows”, esto no deja de ser una clara señal de la crisis de credibilidad ante los medios tradicionales de comunicación por parte de las masas.

DATOS DE INTERES

Ver reporte anual de “US. Entertaiment Industry” en el 2006 : ttp://www.mpaa.org/USEntertainmentIndustryMarketStats.pdf

El peor de los males que ha acarreado la Industria del Entretenimiento con sus productos de consumo general es el de la despersonalización del individuo, así como el de la reptida divulgación de modelos de conducta efectistas y muchas veces violentos.

Seria horrible si miles de tipos insatisfechos, en su afán por vencer la nulidad salen a la calle a disparar, como hizo el idiota asesino de Virginia Tech, o a manejar autos al estilo gansteril de PS2 Miami Vice, o peor: a suicidarse sin testigos debajo de su propia cama, convertidos en la peor de las cucarachas.

Sitios web como: myspace.com son la desesperada respuesta de los grandes monopolios que al apropiarse rápidamente de ideas originales, tratan de atrapar al inmenso mercado del “World Wide Web” (www) e incorporarlo a su viejo y alienante concepto de “pop culture”.

Luego de www.youtube.com ya los Gregorio Samsa de esta tierra no nos sentimos tan solos ni tan raros, vamos creciendo, somos un ejercito mundial de freaks, nos agrupamos en sitios como blogger.com, que a diario salva a mucha gente de su sórdido anonimato o (solo un ejemplo) del vacío insuperable que nos dejan Sex and the City o American Idol. Va y a mucha gente que nunca le ha interesado la política adquiere un verdadero sentido de la vida descubriendo imágenes del mundo en www.flickr.com, o un rayito de esperanza para poder ser diferente sin esconderse, porque ya no se van a ver asilados al decir que no aman las sonrisas de mcdonalds o las guayaberas rojas a lo Hugo Chávez.

Al acercarnos al fin de esta primera década del siglo XXI, los medios masivos de comunicación tiemblan ante la imposibilidad de continuar aglutinando a un gran mercado entorno al concepto de “la opinión publica”.La era Industrial que impulsó la divulgación de una cultura de masas hoy ya comienza a ser parte del pasado, según nos adentramos en la joven era de la tecnología que propugna, con la libre segmentación de los mercados, una apertura a la democracia informativa.

A contrapelo de la ganancia genuina que supone el libre acceso a materiales de información y entretenimiento, surgen dudas sobre el papel educativo que ejerce la Internet con sus nuevas modalidades de comunicación.

Aun esta por descubrir si la inmensa audiencia cibernauta (Norteamérica cuenta con la mayor red del mundo, unos 189 millones) a la hora de elegir lo que considera noticia, opte individualemente por indagar sobre las calamidades de la población en centros periféricos del mundo como África, América Latina y Medio Oriente.

¿Acaso los problemas del medio ambiente y el calentamiento atmosférico (tan fáciles de olvidar) continuaran siendo relevantes para los que cambien definitivamente su equipo de Tv, por un moderno laptop o por un smart phone con broad-band incorporado?

Los niños de hoy serán los encargados de darnos estas respuestas en tan solo unos años, mientras tanto, nuestra generación asiste al largo velorio de los tiempos en que la familia se agrupa en torno al televisor para ver las noticias del mundo.

by GeNeRaCiOn AsErE/tonyg